Vicente Oya, nuestro cronista más querido y respetado ya tiene una plaza con su nombre. Se inauguró el pasado 3 de diciembre en el Parque del Seminario.

El carismático cronista de la ciudad de Jaén, que por cierto anunció que donaría una recopilación de sus escritos a los ayuntamientos de Cambil y Jaén, estuvo rodeado de su esposa, Isabel Jiménez, junto con sus hijos Vicente e Isabel, a los que también acompañó su nuera Teresa, a los cuales dedicó especialmente el homenaje que se le rendía.

Igualmente tuvo un sentido recuerdo a sus hermanos ya desaparecidos Felipe, Manuel y Antonio y a su hermana Mariela, y recordó que Jaén ya tiene una calle con el apellido Oya, a nombre de su hermano Felipe.

    

    

El Alcalde de Jaén, José Enrique Fernández de Moya, realizó una breve semblanza del homenajeado, en la que destacó, no solo su fructífera producción, si no su entrañable personalidad y su carismática figura dentro del entorno social de nuestra ciudad y provincia.

Le contestó Vicente Oya, con emotivas palabras entre las que indicó cómo se convertía en vecino del Camarín, y al encontrarse en tan bello entorno la plaza con su nombre, se sentía aún más cercano a la venerada imagen de Nuestro Padre Jesús, y desde cuya plaza (ahora ya con su nombre), podía ver la hermosa Catedral y la venerada reliquia del Santo Rostro.

Amigos, allegados, autoridades civiles, militares y religiosas se dieron cita para este momento que resultó verdaderamente entrañable. Cabe destacar la presencia del alcalde de Cambil, desplazado expresamente para este momento, Jefe de la Policía Local, concejales del equipo de gobierno del Ayuntamiento, así como la presencia del Obispo de la Diócesis, Ramón del Hoyo López y el subdelegado del Gobierno, Sr. Lillo.

La Banda Municipal de Música cerró el acto con la interpretación de los Himnos de Jaén, Andalucía y España, dando punto y final a un acto que resultó, emotivo, sencillo y cargado de gran afectividad hacia nuestro querido y admirado Vicente Oya, al que JAENDONDERESIDO desde estas líneas felicitama de todo corazón, pues se reconoce "en vida", que es como hay que hacer las cosas una grandísima labor en pro del estudio, trabajo e investigación, entre otras muchas actividades, en favor de nuestra ciudad y provincia.

Texto y fotografías: Modesto Martínez Elías.